Ha vuelto a subir la cajetilla de tabaco. Y el tabaco picado para liar …¡el doble! Me cuentan en el estanco que es la opción de los estudiantes, que no les alcanza para la cajetilla. Pues nada… su gozo en un pozo.
“No trates este tema. Es políticamente incorrecto”. ¿Y por qué no?. Sé que tengo todas las papeletas para que me tumben cualquier argumento. Pero también tengo razones para afirmar que la lucha contra el tabaquismo ha derivado en una especie de caza-de-brujas. La mirada despectiva de la que eres objeto cuando te enciendes un pitillo ¡en la calle! y el comentario “esto se te acaba” es –o parece- más una revancha al puro estilo del “chínchate” que un estímulo positivo para dejar de fumar.
Rastreo en el recuerdo de aquellos años de universidad. Pido permiso ... a nadie ... estoy sola... y enciendo un cigarrillo mientras repaso esas imágenes antiguas, amarillentas como los dedos de mi bisabuelo Arturo, fumador empedernido que murió a los 90 años. Imágenes actualmente inconcebibles, pero no menos reales. Los profesores fumaban en clase, paseándose por aquellas imponentes aulas de la vieja Facultad de Filosofía y Letras de la Central. La mayoría de los alumnos encendían un cigarrillo antes de empezar un examen. Parece mentira... pero sí. Y a nadie se le ocurría preguntar “¿te molesta el humo?”. Unos inconscientes, unos perfectos maleducados, con un atenuante: no nos habían dicho que “Fumar perjudica gravemente su salud y la de los que están a su alrededor”; “Fumar puede reducir el flujo sanguíneo y provoca impotencia”;” Fumar acorta la vida”; “Fumar provoca cáncer mortal de pulmón”. Estábamos instalados en el “mito” - o el “timo”, que para el caso es lo mismo- de que aspirar nicotina, alquitrán y monóxido de carbono era un principio básico para concentrarse. Unos pedazos de ignorantes con un eximente: por aquel entonces funcionaba la máxima Prohibido prohibir. Al final de la clase el suelo parecía un vertedero. Colillas, cenizas y paquetes vacíos estrujados. Un asco... pero ni caer en la cuenta. Unos marranos, pero no más que los que ahora dejan las calles atiborradas de vasos de plástico rotos ... de jeringuillas y látex ... después de una noche de botellón.
Se ha avanzado mucho. Afortunadamente ya nadie ignora que el tabaco perjudica seriamente al que fuma y a los que respiran el humo no deseado. A poca gente se le ocurre sacar el mechero y prender el pitillo sin la aprobación de los presentes. Pero a partir de aquella Nochevieja, justo después de tomar las uvas y felicitarnos el Año Nuevo, la concienciación se convirtió en imposición. No se ha querido estudiar la posibilidad de habilitar algún “cuchitril” –narcosalas las llaman- en los lugares de trabajo que para salir a la calle hay que hacer una excursión. Es como si se hubiera querido borrar del mapa, de un día para otro, a todas las personas que les está costando un calvario dejar de fumar. O a los que han decidido que quieren seguir fumando porque están convencidos de que vivir en el siglo XXI ya es de por sí suficientemente perjudicial.
¿Por qué no escuchamos lo que dicen? Eso dicen...
-Es peligroso comer según qué alimentos porque no se sabe con qué han sido elaborados;
-beber agua del grifo porque está contaminada;
-tomar el sol porque la capa de ozono puede herir nuestra piel;
-cruzar la calle por un paso cebra porque ciertos conductores no lo respetan;
-viajar a lugares paradisíacos porque la tierra está crispada y se resiente de los malos tratos que le propinamos los humanos.
Y más.
Es peligroso ser inmigrante de según qué país, estudiar con según qué compañeros, casarse con según qué tipo –o tipa- que considera al cónyuge de su propiedad... incluso entrar en una mezquita porque a según quién se le ha olvidado qué significa la palabra respeto.
Hay hábitos de vida y circunstancias inesperadas que son perjudiciales; tan perjudiciales que nos pueden causar la muerte. Visto lo visto, los fumadores-fumadores piensan que, puestos a salir perjudicados, quieren perjudicarse –sin ánimo de ofender- como les dé la gana. ¿O es que esta razón no vale? Y de ahí no los sacan.
30 comentarios:
Pero, ¿ha subido otra vez? Yo hoy he comprado un cartón y me han cobrado lo mismo...
Cigarrillo en mano (o en boca según tecleo...):
Qué te voy a decir yo... que sé que es malo, malísimo... pero sigo fumando. Y ya pagaba 500 pesetas hace 15 años por una cajetilla de tabaco en Inglaterra... Y las sigo pagando ahora y creo que las seguiré pagando... Y cuando he dejado de fumar, y si alguna día vuelvo a dejarlo será por otros motivos, diferentes al económico.
Y que hay medidas que están muy bien. Hoy me parece increíble que fumáramos en los exámenes, que fumáramos en los autobuses, que fumáramos en el despacho... Y me parece bien que no se haga.
Me siento mal fumando en las narcosalas de los aeropuertos, me hielo de frío fumando en la calle, me fastidio si no se puede fumar en un restaurante, pero lo entiendo y lo respeto. Entiendo que nadie tiene que tragarse mi humo y no fumo si a alguien le molesta...
Pero, ¿prohibir fumar en la calle, en los parques?
Yo tampoco tengo argumentos de peso, Sunsi. Pero sigo disfrutando con el humo de mis cada vez más caros cigarrillos...
EL ULTIMO CIGARRILLO.
En los asilos hay gente muy mayor.
Algunos ancianos me han contado historias.
Algunas increíbles, otras inventadas.
Pero hay una que nunca olvidaré.
...
En un pueblo de Madrid, de nombre Guadarrama, un anciano me contó cómo era la vida en las trincheras, durante la Guerra Civil.
Me decía que eran jóvenes menores de 25, que obedecían órdenes y pasaban hambre.
Los abastecimientos no eran regulares. Así que tenían que coger comida de donde hubiese.
El tabaco era escaso y apreciado.
...
Me contó que por el día se dedicaban a disparar sobre las posiciones enemigas.
Pim, pum.
Y que por la noche, si a ningún mando se le ocurría una feliz idea, descansaban de las interminables caminatas.
Sólo los mandos tenían tabaco, y la tropa se fumaba las hojas del maiz.
De vez en cuando, a espaldas de los sargentos, la noche se convertía en aliado de la tropa.
Y por muy raro que parezca, los mismos soldados que durante el día se ametrallaban mutuamente, por la noche intercambiaban productos.
Un conejo por un cartón de Chester.
Dos paquetes de Lucky por una paloma.
Una carta para tu madre, por una carta para tu hermano.
Sabían que al día siguiente podían morir.
Así que aquellos cigarrillos nocturnos les sabían a gloria.
Acurrucados bajo un pino.
De dos en dos, para darse calor. Fumando de lado.
Con la mano ocultando la brasa.
Conversaciones monosílabas.
Bajo un cielo estrellado.
Fumándose la eternidad.
De una calada.
En la universidad fumaba un poco. Lo dejé por un ataque de asma que me asustó. Me gusta el olor del tabaco sin quemar y en general no hago problemas porque fumen cerca mío salvo por el olor que queda pegado donde nadie m´s fuma.
Ha quienes se enferman y de una enfermedad terrible, es verdad, pero lo han demonizado y no hay libertad para esto en cambio para otras cosas.....
Pues no es por seguirte este hilo...pero sí, yo también fumo.
Empecé en el Colegio, a una edad que no quisiera que supieran mis hijos. Lo hacíamos por divertirnos, escondidas en un jardín y Ducados que comprábamos de uno en uno y cerillas que olían a cera quemada. Tengo muy buenos recuerdos de aquellos primeros cigarros que nos hacían toser y reír casi en la misma medida.
Luego me pillaron en casa porque olía el baño y mi padre me pidió que si lo hacía no me escondiera. Ahí tuve un parón, me daba vergüenza hacerlo delante.
Fumé en la Facultad, sólo un profesor se negaba a que lo hiciéramos, los ceniceros eran cuadrados y grandes, tres por cada banco. Y en el Bar, con los primeros cafés y alguna cerveza, por las mañanas y las tardes de biblioteca.
Fumé con mi primer novio, sabor a cajetilla compartida, a Renault cinco con la música que nos gustaba, echando humo por las ventanillas y hablando hasta las tantas.
Fumé y fumé y fumé; cuando me casé por nervios, cuando vinieron mis hijos por la emoción, cuando estaba sola para pensar, cuando estaba con gente por el cigarro en sí, con el café, con la copita, con mis amigas para contarnos, con mis hermanas para compartir, con vosotros para escribir...
Siempre hay un motivo. Y aunque sé que es malísimo, sé que me hace daño, ni me planteo dejarlo.
Sólo hay dos argumentos que me hacen dudar; cuando el médico me dice que sigo oliendo a tabaco ( ya ha probado con otros métodos más científicos) y cuando me imagino como una viejecita con el cigarro en la mano. No pega, ¿no?
Es curioso cómo me puede importar ésto.
Mi abuela con 83 se fumaba cada día un cigarrillo rubio con un café irlandés, incluidos whisky y nata.
He cambiado de marca muchas veces hasta que hace unos años, me instalé. El estanquero me regala los mecheros, porque compro siempre cartón.. Y yo pago, y pago, con tal de llevarme este placer-necesidad a casa.
Sí, yo también fumo.
No son razones, lo sé; es la vida.
Y la vida para mí, también se fuma.
Pues yo no fumo, pero en mi casa de toda la vida de Dios mis padres han fumado delante nuestra y yo tengo los pulmones perfectos, y eso que el humo siempre iba para mí ;-) Todas mis amigas fuman también y yo me trago el humo, normalmente no pongo pegas pero como uso lentillas reconozco que a veces me irrita los ojos.
El humo en espacios grandes no molesta, en un aeropuerto, en un restaurante... no molesta salvo que te echen el humo directamente en la cara. No entiendo tantas prohibiciones.
Yo nunca he fumado, no por nada, es que no me ha llamado la atención.
España siempre tuvo sabor a tabaco. Que se lo pregunten a nuestros abuelos y padres.
Ahora somos Espaglobalizacion, vamos que somos igual que un danes o un austriaco. Me parece bien.
Esta bien visto concentrar a los fumadores,en el mas puro sentido nazi. Y claro, de paso les subimos los impuestos del tabaco porque como estan enganchaos seguro que pasan por caja, y rascamos un poco de aqui y de alla. Eso parece que es el interes del estado en todo esto, y de paso evitar asumir el coste bestial que supone a la seguridad social los problemas de salud ocasionados por el tabaco. Pero vamos que realmente lo que supone vivir enganchado a una maquina de Oxigeno ,24 horas al dia, eso se la suda. Al final, todo se reduce a la pasta.
Eso si, que no nos toquen los toros. Donde va a parar comparar a un tipo totalmente mamao en un encierro delante de un morlaco de 500 kg en el pueblo de turno con un fumador.Fumador malo, malo , malo y asesino que intoxicas con tu humo a los demas. Como curiosidad, sabiais que si un toro en un encierro mata a un mozo, el mismo astado se cotiza mas caro en los proximos festejos ? Porque no interviene el estado en eso y les pone a los ayuntamientos impuestos bestiales por la fiesta nacional ?
Y que conste que soy defensor de la tauromaquia a tope.
Usamos diferentes raseros. y si..fumar es muy malo...pero eso ya lo sabemos. Nos sobra informacion.
Si estas en el paro, tu mujer te ha dejado por otro y no viste el ultimo concierto de los Rolling, que te queda ?
Pues darte al humo y la bebida. Eso era antes cuando te lo podias costear.
Si estás en el paro, tu mujer te ha dejado por otro y no has visto el último concierto de los Rollings, ¿qué te queda?.
Mira tus dedos. Son diez.
Capaces de acariciar a una pelirroja a la salida del cine.
Capaces de escribir un cuento sobre el mecanógrafo del Presidente de la República.
Capaces de coger otra mano y saltar juntos a la piscina en invierno.
Capaces de conducir mientras escuchas a los Rollings, con la ventanilla bajada.
El aire en la cara, chico.
Yo no fumo; también pienso que hay de brujas en este tema y que nos hemos pasado varios pueblos.
Ahora bien, ni tanto ni tan calvo ... antes había situaciones a las que nos habíamos acostumbrado y que no eran de recibo; yo estuve años trabajando en un despacho con tres fumadores y había que entrar con machete.
No, Rocío. No ha subido otra vez. Pero ayer, al leer el post de Alfonso, pensé colgar este artículo ...que ya había escrito hace un tiempo. Sólo he modificado el primer párrafo. Porque los estudiantes, con smejantes precios, se han lanzado al tabaco picado. Y van y doblan el precio.
Estoy muy intrigada con lo que va a pasar a raíz de la medida de que no se podrá fumar en ningún bar...Porque los bares también se van a resentir.
Pues nada...Os invito a mi casa, que hule a tabaco rubio.Prometo tener café-café, las bebidas que gustéis...
Porque en casa fumo yo...me pongo la primera porque soy la que más, mis dos hijos mayores... y mi marido sólo por la noche porque hace deporte cuando acaba la jornada laboral ...
Mucha gente me pregunta...¿en esta casa se puede fumar? Y...es curioso... se van directamente a la cocina. Los tengo que sacar y decirles que no hay ni un solo metro cuadrado donde esté prohibido encenderse un cigarrillo.
Por lo menos a mí...sólo me faltaba que me prohibieses el tabaco. Y cuanto más me miran, ma aspiro...Y ojalá supira hacer redondeles... Anda ya...
Parecen talibanes.
Choca esos cinco, princesa...
Se coarta demasiado la libertad personal... creo que nos estamos pasando al otro extremo.
Yo no soy fumadora, nunca me ha molestado que fumen a mi alrededor, también tenía que entrar con machete en la salita en la que tomamos café (personal sanitario... que ya le zumba)... y después de lo observado, sí he agradecido la norma de que no se fume en sitios concretos. O al revés, que se fume en sitios concretos y no en todos. En el personal sanitario eso ha conllevado que la gente fume menos, al menos en mi entorno. El hecho de tener que salir, motiva cierta pereza y al final es cierto que se fuma mucho menos.
En mi casa nadie es fumador empedernido, más bien lo contrario, tiramos más a no fumadores. El hecho de que alguien fume no nos ha molestado nunca. En general lo entendemos como un ratillo de sosiego, quizá sea por eso, porque en mi casa, quien fuma, está un ratillo así, como en conversación consigo mismo o con los demás... en un ratillo de cafeses... a mí me gusta mucho observar a mi padre cuando fuma, sobretodo cuando le da por fumar en pipa...
Me encanta el olor del tabaco de pipa... Vamos, que cuando alguien en mi casa enciende una, pienso que es el mejor aroma que se le puede dar a una casa...
... ahora, el olor que queda del tabaco-cajetilla en una habitación que ha estado muy cargada por el humo... ese olor... ese lo destesto, me ha hecho vomitar literalmente... también confieso que me costaría mucho vivir con una persona que fumase mucho... ufff... el olor reposado del tabaco es inaguantable...
Pienso que como todo, el fumar también tiene su tono... su puntillo atractivo y necesario(para los fumadores). Como todo, tiene un lado atractivo. Y una cosa es cierta, de algo no tendremos que morir... así que si no estás en ese punto enfermizo del tabaquismo, si no eres un fumador compulsivo, de esos que lo hacen maquinalmente, casi sin reflexión, si no estás entre esa población... pues eso... que los disfrutes!!!
No entiendo a esas personas que son tan tuquismiquis con los fumadores... y he observado, que los que peor se las gastan, suelen ser los ex-fumadores. Vaya carácter algunos... ufff... vivido lo tengo, en mi equipo de trabajo habemos de todo... jjajjaa. Y a veces hay alguna que otra trifulca con los deslices de algunos... vivir para ver.
Historias de la guerra, Driver. El hambre lo mataban con las colillas que tiraban los "jefecilloss".Lo poquito que quedaba...en una bolsa para reciclarlo. Me lo cuenta mi padre, que empezó a fumar (no digo la edad porque es de escándalo). Ahora no. Lo dejó en su primer desprendimiento de retina. Pero fumaba tres paquetes diariossssssssssss.
A él no le quda otra que soñar. Sueña que fuma... Increíble después de tantos años.
Un saludo, Inquilino
Creo que sólo por un asunto así dejaría de fumar, Alemamá. Que una cosa es toser y otra ahogarse.
¿Y el cáncer de piel por exponrse al sol sin protección?
Pues eso. Que, efectivamente, han demonizado a los fumadores.
Un beso, Ale
Sigo luego...
Sunsi.
Se me está ocurriendo un tema.
La sal de la vida.
El desarrollo de la teoría de que todo lo bueno de la vida, es gratis y está al alcance de los dedos.
Como la sal.
...
Teoría de la esperanza?
Resucitación?
Renacimiento?
...
Sal.
Simplemente sal.
Con ejemplos se entiende mejor.
¿Jugamos a tirarnos sal?
Caramba... lolo... Has hecho un recorrido de tu vida desde el prisma del tabaco... Y lo bueno del caso es que no me sorprende en absoluto. En absoluto.
Un recorrido parcido al tuyo excepto en los inicios. Empecé más tarde. En un ingreso hopitalario justo cuando se podía decir que estaba en el ecuador de la carrera. Con Ducados, por supuesto.
Y ya. Desde entonces ... El problema llegó con los embarazos. El ginecólogo me permitió que fumara un poco, muy poco... "Es peor la ansiedad que te provoca no fumar", me dijo. "Pero no te tragues todo el humo" Recuerdo a mis alumnos del insti que se quedaron bizcos cuando me vieron con un bombo que pa qué y un cigarrito. "Señu... que esto es muy malo para el bebé..." Ahí sí que no me corté un pelo. "¿Sabéis lo que es malo malísimo para mi bebé? Daros clase a vosotros, que voy de susto en susto". Se rieron... pero mira, me quedé descansada.
Es cierto. Siempre hay un motivo. Siempre escribo con un cigarrillo, obligado con el café...con una charla de amigos... en sobremas largas... cuando leo... incluso cuando paseo... cuando marco un número de teléfono... cuando estoy nerviosa o emocionada o esperando una noticia . Incluso en la playa. Y el último del día... en la terraza, con toda la brisa que llega del mar.
La pregunta sería...¿Cuando no fumas?
Y de vieja, sí me imagino con un cigarrillo. Mi abuela paterna como la tuya. Y murió a los 98 años.
De todas formas, reconozco que tengo que reducir el número de cigarros. Tengo una voz de cazalla... Por teléfono me confunden con un señor ¡Señor...!
http://www.youtube.com/watch?v=o2tLprSl14U
¿Recuerdas? "Juntos ... café para dos fumando un cigarrillo a medias".
Era así. Lo estudiantes no teníamos posibles...
Un abrazo, lolo
Ayer después de nuestra charla, entre cables electrocutados y demás, me subí al coche y en la radio sonó una canción del triunfito Manuel Carrasco y Malú "Que nadie". Escúchala y si te gusta cuélgala por esta república, con tu permiso,claro.
Gracias por tu generosidad.
Besitos
Bego
LA SAL DE LA VIDA
Lo cierto es que tengo un enfado de mil demonios.
Y uno de los motivos es la cantidad de veces que me toman el pelo.
Y una de las mayores tomaduras de pelo de este año, ha sido el asuntillo de la vida.
Que si te mato por aquí, que si te mato por acá, que si una coma antes de vida, que si unos puntos suspensivos detrás.
Y yo estas cosas me las tomo en plan personal.
Porque me duelen mucho.
...
Mañana hay una manifestación en Madrid, con un lema que me importa un bledo, sobre una ley que me la trae a fresco, convocada por unas plataformas que me importan un pito, que serán contestadas por otras plataformas que me importan un carajo.
Sólo tengo clara una cosa.
Voy a ir, porque quiero hacer algo.
Supongo que entre tanta gente habrán muchas mujeres embarazadas.
Voy a por ellas.
Resulta que llevo una racha de amigas embarazadas, que están viviendo con miedo.
Les han metido el miedo en el cuerpo.
Y me lo tomo en plan personal.
Voy a comprar sal, rellenar un par de saleros de esos grandes y cazar a cuantas embarazadas vea mañana.
No tengo ningún motivo racional, ni político, ni ideológico.
Simplemente se que debo hacerlo.
Me acercaré a ellas, disimulando mi cabreo profundo.
Les sonreiré (eso siempre allana los caminos), le daré la enorabuena por su embarazo, y luego les daré un poco de sal.
Sobre su mano.
Y les diré: "Tú eres la sal de la vida".
...
Posiblemente alguna me tirará la sal a la cara, con las más tímidas seguro que la cago, y si alguna tiene la hormona torcida es probable que me suelte una fresca.
Son las reglas del juego. Cuando te arriesgas te arriesgas.
Pero si hay una sola, una sola, que me sonría y me de las gracias, entonces mi tonto gesto tendrá un sentido.
Y si alguna siente menos miedo porque un desconocido le ha regalado sal, entonces me daré un beso.
Y entonces, tal vez, se me atenúe este cabreo que tengo.
Porque una mujer embarazada es...
La sal de la tierra.
Creo que deberías mandar este post a la Moncloa. Dicen que Zapatero ha vuelto a fumar. Está de los nervios y es natural. Natural que esté de los nervios y natural que lo calme con un cigarrete. No quiero ni pensar si se le queda la voz cazallosa.
El hipnotizador dijo:contaré de 10 a 0 y te despertarás, 10..9..8..7.......y tachánnnn!, !me despierto y ya no tengo ganas de fumar!
20 años de mi vida fumando... Me duró 3 días el asco al tabaco, al cabo de 1 semana tenia invitados fumadores en casa a los que por supuesto les dije que podían fumar...el olor del humo me traía buenos recuerdos. Aguanté, tuve valor para no arrancarles ese cigarro de la boca. Hoy cumplo 15 días sin humo. Es duro Sunsi.
T´estimo molt Sunsi. Eul.
Sunsi,voy tan deprisa escribiendo que no he repasado mi comentario anterior, me he dado cuenta de que en realidad lo que quería expresar cuando digo "aguanté,tuve valor para no arrancarles ese cigarro de la boca", quería sencillamente expresar mi sufrimiento por no poder fumar ese cigarro yo.¿Y sabes que? mucho me temo que esta sensación la voy a tener toda la vida.Snif.(Todo sea por mis hijas,dicen que hay que predicar con el ejemplo).
Eul.
Hola, Sunsi!
Actualmente se está persiguiendo el tabaquismo y a lo mejor no te gusta lo que te escribo, pero ya era hora.
Creo que pertenezco a una generación a camino entre los jóvenes y los que ya sois algo maduritos; y seguramente pagáis justos por pecadores, como casi siempre, pero es que lo de los fumadores ha sido y es una pasada.
Si vas a cualquier playa española, te la vas a encontrar llena de colillas por todas las partes; hay quién piensa que se trata de un gigantesco cenicero y a muy pocos los he visto con los cono-ceniceros.
La calle está llena de colillas por todos los lados
Más de una vez he estado tranquilamente en un bar tomándome agustísimo un bocadillo hasta que se me ha puesto uno al lado fumando y echándome todo el humo.
En cantidad de colas, en el fútbol, los toros se me ha sentado alguien al lado y he tenido que fumarme pasivamente los cigarros que le han apetecido encenderse, suponiéndome a mí un suplicio cada nuevo pitillo, pero aguantándome.
Las discotecas, los bares; lugares cerrados en los que te pican los ojos y se respira un olor a tabaco insoportable; luego cuando llegas a casa te huele toda la ropa y el pelo a tabaco. Sin poder hacer nada para evitarlo si acudes a estos sitios.
Comprendo que seáis una generación en la que los protagonistas de las películas cuándo estaban moribundos lo último que deseaban y pedían a su compañero era fumarse un pitillo, luego veíais su cara de placer al aspirar las caladas. Pero, os han engañado, para que compréis ese veneno adictivo que es el tabaco.
DEJA DE FUMAR; ya verás como te encuentras mejor y, además, ahorras.
Un beso y espero que no te moleste mi comentario
Aprendiz... Algo que no es necesario que aprendas: sacar humo por la boca. Todo esto que te ahorras...en salud y en euros.
Y gracias por tu respeto. Queda poca gente así... que no va con aire de "soy fumadora pasiva y no me quejo..."
Un beso, guapa
Te he dado más cancha para que sigas desahogándote, Alfonso. Al fin y al cabo, sólo tenemos derecho a esto: la pataleta.
Se acaba de marchar de casa la hija de sarracena... una universitaria con la que podrías pasarte todo el día hablando sin cansarte. Pues sí, por supuesto... Café cargado y unos cuantos cigarrillos. Entre ella y yo hemos llenado el cenicero de colillas. Tan a gusto hemos estado que no hemos llevado la cuenta... Qué le vamos a hacer... No concibo una conversación cordial sin un piti. Peor sería que le diera a la ginebra ...
Un saludo, Alfonso.
No me volveré a equivocar de nombre. Palabra.
Es eso, Modestino. Ahora no cocebiría fumar en un aula ... menos en un hospital, delante de una embarazada o de alguien con alergia... ni siquiera en la calle. Lo de tu despacho compartido... para grabarlo. Y supongo que tú, callado como un muerto.
Hay normas básicas de convivencia que no se tenían en cuenta. Por fortuna hemos entendido que hay gente a la que le molesta mucho tener al lado a alguien que fume.
Pero de esto a que te traten como a un apestado/a... Y dale con subir los precios... No creo que el tabaco sea un artículo de lujo. Igual no soy objetiva...
Un saludo, Modestino.
Ana. El tufillo reconcentrado que desprenden lo ceniceros... Me ha hecho gracia. Porque llevas razón. Pero es que los ceniceros se tienen que vaciar... y hay que ventilar. Vamos... yo ventilo mucho... Si no, la casa apestaría.
Ana... No me digas que no podremos tener tú y yo un encuentro real. Te veo riñiéndome ... igual con razón...
Tengo que reducir el nº de cigarros...Debería pensarlo seriamente. Pero no porque suban
los precios. Hay razones con mucho más peso.
Bssssss, Anita
Mireita. Siempre es una alegría para mí que te pases y dejes huella. ¿Tú crees que está nervioso? Ya me gustaría. Que a él parece que la crisis no le afecta.
¿Se la mando? Pues lo pienso y te digo...
(voces ... Es María:"A cenaaaaaar"
Esta chica... va para ministra. Hay que ver lo que le gusta mandar. Y no lo parecía...)
Abraçades
Luego sigo...
Sunsi, querida, yo digo que si fumar no es bueno, que no lo vendan, pero si lo venden, que nos dejen fumar en paz.
Yo fumo poco y me gusta ser muy respetuosa, pero vamos, que tenemos a los cachorros de ETA en la p. calle y fumar es casi un delito. Amos hombre.
Bss desde aquí tb.
Mñna te vienes conmigo a Madrid. Vas conmigo¿hace?
Un bs
Luisa
Me gusta fumar. El primer cigarro me lo fumé con mi hermano. No sólo me sentí mayor sino que encima me gustó. Maldigo ese día. Ahorraría 1200 € anuales que me gastaría en otra cosa, seguro. Lo hago casi todo con un cigarro en la mano. Pensar, lo primero. Hablar, lo segundo y escribir, lo tercero. Mis palabras necesitan tabaco. Una conversación siempre sabe mejor con un cigarro.
Todo el mundo tiene algún vicio. Los que no fuman, beben como cosacos. (O algo peor) Quizás deberían perseguir otras cosas que sí empeoran el mundo.
Fumar mata -o acorta la vida- mi vida. Sobreexplotar los recursos naturales nos mata a todos. Por lo de la contaminación ambiental (los contaminantes provican cáncer, también)
A mi me molesta que me critiquen por fumar, sinceramente. Con la cantidad de cosas reprobables que tiene la gente y a mí me critican por fumar. Lo peor es que no es sólo una persona, es la sociedad.
Triste, como tantas otras cosas.
Besitos*
Muchas gracia a todos por pasaros por esta república, por leerme, por opinar. Cierro un tiempo. Igul no van a ser más que cuatro días... aún no lo sé.
Siento no haber podido contestar a todos.
Prometo hacerlo cuando lo retome. No quiero que nadie se quede sin un comentario personal.
Un saludo cordial.
Gracias siempre.
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