jueves, 20 de noviembre de 2008

Gaviotas... las echaba de menos.

Con ésta ¿hay quorum?




Las ganas que tengo de que "alguien" vuelva a describir el vuelo de una gaviota.
A buen entendedor.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Por un terrible momento, pensé que habías enchufado a Neal Diamond y Juan Salvador Gaviota.

Con esta, sí.

Gracias, hedbanna.

Tendré que armarme de valor para leer a D, en plan volátil.

Anónimo dijo...

...la tormenta estaba a punto de comenzar, ....el miedo se apoderó del alma de todas las gaviotas de la bandada,...no había ni una que supiera nada...nada de lo que había que hacer en una situación así, era imposible contener al enemigo, la lluvia, el frío y el miedo.

¿De qué sirve vivir si me atenaza el miedo?

¿Qué pasará dentro de una hora?

Sólo había un ave que intuía lo que había que hacer.

Una sola ave para tomar una decisión.

Un segundo de gloria o una eternidad en el infierno.

...(continuará porque la idea está entre el lóbulo superior y la meninge izquierda, hay que esperar un poco, sólo un poco, la idea al final se ordena sola).

Máster en nubes dijo...

¡Genial, Sunsi, vivan los pájaros!

¡chan chan chan!!

¡intriga intriga...

Driver... qué emoción ...

que no sé por dónde vas a salir, que esto es como la tensión sexual no resuelta de Luz de Luna pero mucho mejor...

Y sí, Pepa, yo también pensé que iba a ser Neil Diamond y Juan Salvador Gaviota... ¿a que te acuerdas? Qué juventud con Song, sung blue, sweet Caroline... en fin.

Pero cursi, era. Perdón, para mí, es personal. Mejor la marcha que nos ha puesto Sunsi, que es TOTAL!!!

sunsi dijo...

Me voy a ver "Los últimos días de Franco". No me lo quiero perder. A ver cómo lo enfocan.

Si no me gusta me voy con las gaviotas....

Anónimo dijo...

D hoy estás Mc, aunque sea con las gaviotas; venga, espabila a la neurona y díle a la meninge que se calme un poquito.

Máster, bonita, el cursilín de ND más bien de nuestra infancia, que el colega es un poco abuelete.

Y Song, song blue y Sweet Carolines nos pilló de revival, creo.

Anónimo dijo...

Esta canción significa mucho para mi, me trae muchos recuerdos...verano del 87, ¡cómo pasa el tiempo!. La echaba de menos.
¡M.Gracias!

Anónimo dijo...

GAVIOTAS EN EL ACANTILADO

No eres la más sabia ni la más fuerte.
Simplemente tienes mucho que perder.
Por eso te arriesgas.

En las islas del mar Báltico las gaviotas anidan en los acantilados.
Es un sitio como otro cualquiera. El acantilado.
Somos muchas.
Unas creyentes, otras agnósticas.
Las hay incluso aconfesionales.
Pero todas somos aves.

Nuestra vida discurre en un devenir continuo entre la pesca y el nido.
Un día y otro también.

Los vientos de este mar son afables. Normalmente.

Aquel jueves de noviembre el viento roló al norte y se mezcló con la furia de las nubes grises.
...la tormenta estaba a punto de comenzar, ....el miedo se apoderó del alma de todas las gaviotas de la bandada,...no había ni una que supiera nada...nada de lo que había que hacer en una situación así, era imposible contener al enemigo, la lluvia, el frío y el miedo. El miedo.

¿De qué sirve vivir si te atenaza el miedo?

¿Qué pasará dentro de una hora?

Estábamos atrapadas entre el acantilado y la tormenta. Si te vas malo, si te quedas peor.

Sólo había un ave que intuía lo que había que hacer.

Una sola ave para tomar una decisión.

Un segundo de gloria o una eternidad en el infierno.

La señora miró de frente a la tormenta. Salió del nido espoleada por su instinto.
Sus ojos azules tenían la belleza de la edad y la determinación del genio.

Si hay que morir lo haremos con dignidad.

Desplegó sus alas y se dejó llevar por el viento del norte.
El primer envite del vendaval la arrojó contra las rocas.
Se lastimó en las alas pero su alma permaneció intacta.

Lo volvió a intentar con las alas pegadas al cuerpo.
Se dejó caer y sin planear entró en barrena.
Directa al vacío.

Y cuando estaba a punto de estrellarse, abrió súbita y dolorosamente su velamen, lo extendió con orgullo y arrogancia.

¡DIXIT!, -gritó-

Y la vieja ave logró encontrar la pirueta de salida, la acrobacia sentida para escapar de la trampa del viento del norte.

Marcó el camino para que el resto de la bandada la siguiera.

No eres la más sabia ni la más fuerte.
Simplemente tienes mucho que perder.
Por eso te arriesgas.

Gaviota madre.


Un segundo de gloria o una eternidad en el infierno.

Anónimo dijo...

Conste que lo leí a primera hora de la mañana, sobre las 6.30.

Me gustó.

Mucho.

No es pastoril.

Tiene fuerza.

No es cursi.

Tiene garra.

Es más "diego" que "driver".

Lo cursi, blandito y pastoril, viene después, en la entrada siguiente.

Lo borde y antipático, también.

Perdonadme.

Anónimo dijo...

Ésta es mi chica.

Anónimo dijo...

Corazón, corazón............ mi seductor caballero