lunes, 3 de noviembre de 2008

Ganas de polémica.


Porque creo que es eso. Parece ser que la Reina no tiene derecho a opinar. Y yo hoy le doy la vuelta. Parece ser que yo no tengo derecho, como súbdita o ciudadana, a saber qué opina la Reina.


No es que sea monárquica... tampoco me identifico con ningún partido político. A estas alturas de la película me limito a ser ciudadana y procurar ejercer mis derechos y cumplir con mis deberes.


Pero la Reina es otro asunto. Que me disculpe el Rey, pero no sé qué hubiera sido de la Corona sin la sombra alargada de Doña Sofía. Inteligente, prudente, educada. Sabe cuál es su lugar, siempre lo ha sabido. Por tanto, ella también sabrá por qué ha hecho las declaraciones que ponen los pelos de punta a unos cuantos y que recoge el libro de Pilar Urbano.




Sofía: “La vida y la muerte no están en nuestras manos”
La Reina habla claro contra el aborto, la eutanasia y el “matrimonio homosexual” y a favor de la religión en la escuela en el libro “La Reina muy de cerca”
“Puedo comprender, aceptar y respetar que haya personas con otra tendencia sexual, pero ¿que se sientan orgullosos por ser gays? ¿que se suban a una carroza y salgan en manifestación? (···) Si esas personas quieren vivir juntas, vestirse de novios y casarse, pueden estar en su derecho, o no, según las leyes de su país; pero que a eso no lo llamen “matrimonio” porque no lo es; hay muchos nombres posibles: contrato social, contrato de unión,...”.


Son palabras de la Reina de España, Sofía, en el libro de Pilar Urbano “La Reina muy de cerca” (Planeta), presentado este jueves 29 de octubre, en el que también defiende la enseñanza de la religión en la escuela y la vida desde su origen hasta su fin natural.
Los temas familiares aparecen en diversas ocasiones en el libro, de 320 páginas. La Reina, que este domingo 2 de noviembre cumple 70 años, afirma: “La inmensa mayoría de las familias son normales, como ha sido siempre la familia natural: marido, mujer, hijos, nietos,... cuñados, tíos, abuelos. No una comuna de gente con un aluvión; o trozos de familia, los hijos de él con la primera mujer, los de ella con el marido anterior, que se pretenden juntar de un modo forzado y artificial... Por muy potente que sea una moda y por mucha propaganda que le echen, hay cosas que no pueden cambiar: el hombre y la mujer como pareja inicial, es una ley congénita con nuestra naturaleza; y no es una ley de animales; es exclusivamente humana”.

Para la Reina, “mantener un matrimonio es difícil, exige cuidados, renuncias, y algo de lo que la gente no quiere ni oír hablar: sacrificio”.

Sin embargo, Sofía defiende el amor como base del matrimonio, también de los matrimonios de monarcas. “Si en la pareja hay una ilusión, un atractivo mutuo, una base de amor y de amistad, si se quieren y se gustan y a pesar de los enfados hay buena química..., entonces, los baches pueden superarse mejor que si se casaron por un diktat de intereses de Estado”, opina.

En el libro, Sofía defiende “la igualdad social y jurídica entre el hombre y la mujer: igualdad de trato, de educación, de derechos, de oportunidades... ahora bien, no somos iguales; fisiológicamente y psíquicamente, somos diferentes; y lo que tendríamos que conseguir es que en las leyes se plasmase esa condición diferente como algo esencial a respetar, porque está en la naturaleza”.

Preocupada por la violencia en televisión

Entre muchísimos temas que la Reina trata con palabras directas en el libro se encuentran también el de la violencia doméstica. “Violencia doméstica, palizas, incluso parricidios... han ocurrido siempre –señala-; ahora se informa más y con todo detalle; en cierto modo, se provoca un contagio, se dan ideas que otros imitan; los que son propensos tienen un filón en esas noticias”.

Sofía muestra su preocupación por “la sangre y el morbo” de muchas noticias y considera muy preocupante “la carga de violencia en los programas y series y películas de televisión”, que “es tan brutal, y tanta”, que “la gente se está insensibilizando ante el dolor, las catástrofes, los asesinatos, la visión de una masacre o de un montón de muertos en un atentado terrorista”.

No al aborto ni a la eutanasia

La Reina considera que “hay que respetar a toda criatura que ha empezado a vivir” y la dignidad de la persona que está cerca de la muerte, cuya familia deben “aguantar y seguir ayudándole” sin “prisa para morir”.

“¿Está a favor del aborto?”, le pregunta la autora. –“En absoluto”, responde la Reina. “¿Y de la eutanasia?” –“No soy partidaria; la vida y la muerte no están en nuestras manos, ¿muerte digna? Totalmente de acuerdo”, responde.

“No estamos aquí solos, ni por casualidad”

Respecto a la asignatura de Religión, la Reina considera que “se debe enseñar religión en los colegios, al menos hasta cierta edad: los niños necesitan una explicación del origen del mundo y de la vida; una orientación de moral natural: qué es el bien, qué es el mal; y una seguridad en que no estamos aquí solos, ni por casualidad, que hay algo más, que hay Alguien”.

La Reina explica con naturalidad que, en una ermita situada en el exterior de La Zarzuela, los domingos se celebra Misa, “y vamos los que estamos; si mi hijo está, él ayuda de monaguillo”. “Yo sigo mi religión de siempre: desde que nací me bautizaron cristiana –declara-. Soy cristiana, soy católica”.

Sofía era ortodoxa antes de casarse con el Rey Juan Carlos y dio el paso al catolicismo, “de corazón lo di antes de casarme”. “A pesar de tantos siglos de cisma entre la Iglesia oriental y la latina, no es tanto lo que nos separa; son dos cuestiones: el primado del Papa y el Filioque... lo del Espíritu Santo”, explica.

Sofía también defiende la libertad religiosa, “pero no como estrategia para hacer un... ¿batiburrillo?... un batiburrillo de religiones, y que al final, ¡allez hop!, se disuelva el hecho religioso”.

En una de las salas de las estancias de la Reina, describe la autora del libro una Virgen del Pilar con un manto de color cereza situada en una mesa rinconera sobre un pedestal de porcelana blanca, una talla “de líneas modernas en cerámica y esmalte dorado”, colocada en los últimos trece años.

En otro capítulo, Sofía niega que el Rey sea masón. “En lo que respecta al Rey nuestro, te puedo asegurar rotundamente que no; nada de nada, nada de nada” –señala-. En esta familia no hay masones”.

Críticas y aplausos

Algunas palabras de la reina en el libro “La Reina muy de cerca” han suscitado críticas de algunos sectores como colectivos de homosexuales y el partido Izquierda Unida; aplausos de otros como la Federación de Asociaciones Provida y la Asociación Víctimas del Aborto, y el respeto de los principales partidos políticos de España, el PSOE y el Partido Popular.

La Casa Real ha emitido este jueves un comunicado que destaca la “profunda actitud de respeto” de la Reina hacia todos y su “cercanía hacia quienes sufren, son perseguidos o discriminados”. Hace una semana, la misma Casa Real daba el visto bueno al libro “en su integridad”.

La Reina deja claro que ha realizado todas las declaraciones a título personal, lo que las desvincula de cualquier cargo. “La Reina habla para el mundo entero; no es la voz de la Zarzuela, del Jefe del Estado –señala-. Son sus reflexiones personales como mujer”.


26 comentarios:

Lucía dijo...

¿Ya has leido el libro? tengo ganas de hacerlo . Promete. Los que lo critican creo que son los que quieren que todos piensen como ellos. Alguna vez tiene que haber alguien que piense como "los otros" ¿no?

sunsi dijo...

No lo he leído. Tengo también ganas, la verdad. Y me alegro mucho de que la Reina haya abierto la boca para decir lo que piensa.

Anónimo dijo...

A mi no me interesa nada el libro, ni la polémica que se ha montado, ni las televisiones hablando de lo mismo, ni- perdona Sunsi- el Forum Libertas.
No es que los difuntos me hagan ver la vida de otra manera, pero qué quieres que te diga,me gusta el fair play hasta en estos temas

Anónimo dijo...

Conste que estaba con las pilas cargadas, a punto de entrar a matar, pues las que me conocéis, sabéis que determinados temas me tocan muy de cerca.

Y, de repente, te he leído Mireia y ¡puffffffffffffff! como un globillo.

Y me he acordado que, de vez en cuando, es preciso predicar con el ejemplo.

Más fair play y menos de todo lo demás.

O ¿por qué no? Más Evangelio y menos opinión.

Gracias Mireia.

Fdo.

MJ. Llanes del Barrio, socia de número de la Sociedad "BOMBO MUTUO"

Anónimo dijo...

Sunsi,

Te he encontrado a faltar, me has dejado colaga con la birrita prometida.

sunsi dijo...

Pepa, siento no haber podido asistir. Tenía muchas ganas de oír a Marisol y de verte. Cuestión de fuerza mayor. Por eso, ya he renunciado a hacer planes a largo plazo. Luego es peor. ¡Paf! ya se te ha chafado.

¿Qué tal ha ido?

sunsi dijo...

Mireia, una vez he salido al balcón y me he tomado un café con el consabido cigarro, estoy en condiciones de contestarte.

Contestarte a ti es otro asunto. Respuesta la tuya que tiene muchas lecturas. Entre las letras se puede incluso escuchar tu respiración. Y aún está por nacer quien a ti -con todo lo llovido- te diga en qué momento es interesante X o Z.

Espero que, con el tiempo, sea capaz de coger mi nariz con dos dedos de mi mano derecha y decir bien alto: "Aún está por nacer quien me diga qué tengo que opinar, qué es lo políticamente correcto, qué debo hacer en este caso o en el otro". Y espero saberlo decir sin herir a nadie, sin descalificar a nadie, sin pisotear la opinión de nadie. Esta última parte es -creo-tan fundamental como la primera.

Este fin de semana me he acordado, he rezado por de tus padres.

Anónimo dijo...

Sunsi, ha ido muy bien; Marisol, ya sabes, es una garantía siempre: interesante, culto, justo, nada cursi y todo un testimonio público de fe.

La bomba.

Anónimo dijo...

Pepa: gracias por tu apoyo. Los temas serios creo que se han de tratar seriamente.

Sunsi: Dicho lo anterior, te confieso que estos días en Valencia acabé ahíta del tema de la Reina y la periodista.
Por supuesto que todo el mundo puede expresar su opinión, pero me parece un circo que Pilar Urbano insista en que lo escribió en mes y medio, que esté en todos los programas del corazón de la mañana, tarde, noche y madrugada . Y como colofón que "los que han salido ganando con todo este asunto son mi editorial y yo"
Razón no le falta.

Pero qué le voy a hacer. No me gusta cómo escribe la Urbano. En mi caso consigue un efecto rebote. Ni ella tiene la culpa (del efecto rebote) ni yo tampoco.
Esto del gusto va como va.

Sunsita: No te gastes pasta en este libro. Te presto dos traidítos de Valencia en especial para tí. Te gustarán seguro

Gracias por acordarte de mis padres.
Petons

Anónimo dijo...

Por cierto, Pepa:
Firmado por la socia- fundadora de la sociedad del bombo mutuo

Anónimo dijo...

Mireia, nada de gracias; ante la sabiduría, retrocedo llena de reverencia.

Además, coincido contigo respecto a la Urbano, pero como soy mucho menos sabia y aún menos caritativa, te diré que me parece una petarda integral (dicho sea sin ánimo de molestar)

Hasta otra, socia.

Anónimo dijo...

La señora me ha llamado.
Quería dar un paseo.
Nunca me niego.
...
Tenía que recogerla a la salida del Teatro Real.
"Lléveme al Tempo de Debot".
"Enseguida señora".
"¿Puedes correr un poquito?".
"Sí señora, con precaución, pero puedo correr".
...
La señora se ha anudado un bonito pañuelo azul y ha bajado las ventanillas.
Quería sentir la brisa.
...
Al llegar al Templo egipcio que hay en Madrid, la señora me ha pedido una cosa .
"Hoy es mi cumpleaños y me gustaría bailar".

Me dice que está contenta, que en días como el de hoy recuerda su infancia en Grecia, y que vamos a bailar.

"Señora, no sé bailar como los griegos".

"Fíjate, es muy fácil".

Se ha puesto de puntillas, ha elevado sus brazos como Antony Queen, y gira que te gira, sacó el mediterráneo que lleva en su alma.

Intento seguirla. No es fácil.

Me instruye. Driver ríete. Ése es todo el secreto.

Me dejo llevar por la música de su sonrisa; primero sonrío, alzo los brazos, después río..., bailo.

Oigo el sonido del Nilo desembocando en el azul, el blanco puro de los templos griegos, el azul levantino abriendo los cielos.

De todas las cosa que me podían haber pasado hoy, voy y descubro que tengo una reina mediterránea.

La reina de mi vida.

sunsi dijo...

Es que creo que aquí hay varios frentes para comentar.

1. Pilar Urbano. De ella, si os fijáis bien, no he dicho nada. Y he leído tres de sus libros. Pero venga, ésta es mi opinión. Es barroca. Creo que abusa de voy-a-decir-esto. Y aquí hago autocrítica, abusa también de metáforas pelín complejas y de mentar los tuétanos ,las enjundias, las tripas de y las musculaturas. No sé si me explico.

Creo , no obstante, que a mí me gusta más que a ti, Mireia. Aunque sólo sea porque un día leí un trocito del Hombre de V.T. y me fue muy bien. Sería una injusticia que no lo dijera.

2. La Reina. Ya he dicho que no soy monárquica convencida ni por convencer. No sé qué es lo mejor para esta España nuestra. Pero la Reina, como persona, me merece mucho respeto; mucho más que el Rey, dicho sea de paso. La pena es que su opinión sobre temas importantes va a quedar como una anécdota en medio de tanto circo.

Al final, como siempre. Que si la Urbano que está como una momia y que ya sabemos de qué pie calza etc, etc, etc.

Pues será todo lo petarda que quieras, Pepa, pero ya está bien de que siempre tenga que salir a relucir sus vínculos personales con determinada Institución. De esa Institución conozco gente que no se parece a ella ni en la uña del dedo meñique del pie derecho o izquierdo. Churros con merinas. Hasta el gorro estoy de que siempre jueguen a lo mismo.

No sé si me he explicado. Francamente, a Pilar Urbano no la conozco. La veo muy desmejorada y crispada. Pero éste no es mi problema. Lo que me interesa es la opinión de Doña Sofía.

Abraçades.


¡Ah!, Luisa, que con este lío no te he contestado. Mi hija aún me pregunta si entro en tu blog. Quiso montar uno pero creo que se perdió

Desire dijo...

Creo que cualquier persona tiene derecho a emitir su opinion sobre cualquier tema sea ella reina o simple ciudadana.
Lo malo es que por se reina todo le critican, aca ya ha salido el tema de que ella habla mucho sobre el matrimonio hasta la muerte etc. y tiene una hija en proceso de separación, como si ella tuviera algo que ver o hacer en la vida de la hija.

sunsi dijo...

Precioso, Driver. Sencillamente precioso. Y preciosa la capacidad de encontrar el Mediterréneo en las personas y en las cosas.

Y, como siempre, el bálsamo.

Gracias. Muchas gracias.

sunsi dijo...

Hola, Desiré. Supongo que , como ya ha dicho Mireia, desayunaremos, almorzaremos, merendaremos y cenaremos durante un tiempo con el tema. Y se analizará con lupa lo que ha dicho la soberana.

Completamente de acuerdo contigo. Cada cual que asuma sus responsabilidades. los actos son individuales. La Reina y su hija diría que son dos personas distintas. Pero ya se sabe, la cuestión es hablar.

Abrazos

Anónimo dijo...

Sunsi:

1) Urbano me parece petarda a mí, independientemente de sus cojeras, de sus piés y de toda su anatomía.

También independientemente de su calidad literaria y, desde luego, de la personal.

¿Por qué? Las pertadas nos reconocemos entre nosotras.

(Otra petarda de pistón es Rahola, nada que ver, pero petarda)

2) Del libro, de la Reina y demás, me remito a mí misma y a Mireia 16.43.

(Prueba de petardeo núm. 1, citarse a uno mismo)

3)¿Cómo voy a negar a los demás lo que exijo para mí misma? Opinad, hedbannas, opinad.

(Prueba de petardeo núm. 2: la pretensión de resultar graciosa a toda costa)

Y ya me largo (de esta entrada) que la falta de sueño me afecta.

Anónimo dijo...

Hay que ver lo que da de sí el ardor guerrero que se respira en esta página.
Efectivamente hemos entrado al trapo. Es verdad que los temas importantes es bueno que los traten personas con preparación como la Reina (ya veis, con mayúscula)pero de otra manera, con otra salsa.

En cuanto a Pilar Urbano creo que acierta al hacer caso omiso cuando la llaman "fundamentalista del Opus Dei", por poner un ejemplo.Hay que centrarse en lo que le ocupa: la venta del libro.

Respecto al Opus Dei, creo que hay que tomarlo más en serio (si se quiere hablar en serio) que relacionarlo con una señora bajita, provocona, friolera o huérfana de guerra ¿Qué tendrá que ver el culo con las témporas?

Anónimo dijo...

Efectivamente, Mireia, nada de nada.

Coincido contigo en tratar lo serio en serio.

Ahora bien, he de reconocer mis pecados, con dolor de corazón y propósito de enmienda (¡mea maxima culpa!) hay cosas (ej. el Opus Dei) que despierta mi lado malvado.

Claro que no el Opus en sí mismo, Institución a la cual respeto con myúscula, sino cuando entra el ardor, no guerrero, sino pastoril.

Así que a todos y todas, mis sinceras y rendidas excusas; prometo enmedarme, aunque recordad: la carne es flaca (bueno, en mi caso, débil ¡ya me gustaría flaca, ya!)

Anónimo dijo...

Pepa: Viva tu lado malvado.
Es un lado ¿cómo le llamaría? contestón, pero no peligroso en el sentido de ir sin frenos y cuesta abajo, a por todas. No noto resentimiento ni excesiva irritación, aunque a lo mejor estoy equivocada
A tí te rebelan algunas cuestiones, otras ni fu ni fa y otras, pue sí, que muy bien.
Como a todo ser humano.

Otra cosa es arremeter a propósito de pum

Creo que no es tu estilo

Anónimo dijo...

Je, je, je, Mireia.

¡No me des cuerda!

En una cosa tienes razón: para nada resentida, antes bien, agradecida. E irritar, la verdad, me irritan otras cosas.

Por otro lado, cuando las acólitas se ponen pastoriles, el ceño se me queda "arrugaíllo, arrugaíllo" y los dedos se me hacen huéspedes.

sunsi dijo...

Acabo de llegar a casa , enchufo el portátil y os leo. La verdad, me he reído mucho. Qué par de dos.

Aquí, una acóloita que profundizó en la literatura pastoril en sus años mozos de facultad.

Pepa, me temo que te voy a tener que regalar esa cremita de colágeno que usa mi madre. Es una fórmula magistral que va de maravilla para las arrugas del entrecejo. A veces me encanta ponerme cursi ... yo le llamo a eso ponerse sentimental. "Cada uno es como es, cada quién es cada cuál". Es de Serrat.

Eso sí, en temas del como el Opus Dei no me pongo ni cursi ni guerrera. No me pongo de ninguna manera a no ser que se trate de una calumnia (distinto a difamación y murmuración), que por ahí no paso, ni con el Opus Dei ni con nada.

Estoy con los dos que hay temas serios y hay que tratarlos como tal. Y sin fanatismo ... creo que es eso ,Pepa, más que de pastoril se peca de lo otro.

Un saludo

Anónimo dijo...

Pues nada, hedbanna pastorcilla, mi cumple es este mes (44) así que espero, al menos, DOS canutillos de colágeno.

¡El ceño será lo ún oco que me quede en su sitio!

Prometo intertar ser buena

Anónimo dijo...

Dios, Pepa. Si eres una niña.
Lo que te ha dado de sí la vida

Anónimo dijo...

Sunsi, deberías poner un chat, que una ya se pierde aquí con tanto comentario personal ;).

Al tema, lo de la Reina ha sido una metedura de pata porque ella es Reina 24 horas del día y no se tiene que olvidar que para eso la pagamos, para que sea prudente y se calle la boquita.

Ahora, como ciudadana y persona, estoy totalmente de acuerdo en TODO lo que ha dicho y sí, me parece deleznable el acoso y derribo al que se le ha sometido. Ahora bien, las críticas hay que tomarlas según de quién vengan y, gente, vienen de IU y de colectivos homosexuales. ¿Pues qué esperábais?, ¿qué rieran la gracia?. Son fieles a sí mismos y a su natural intolerancia. Lo que tiene ser tolerante es que se es respetuoso en silencio, sin propagarlo a bombo y platillo.

La gente progre no me gusta NADA. Sobre todo una señora que se llama María Antonia Iglesias me pone de los nervios. Cada vez que la veo en televisión cambio de canal, no porque sea de izquierdas (que yo escucho a todos) si no porque es una maleducada gritona que no respeta a nadie y no deja que los demás se expresen con libertad, amén de su visión maniqueísta de la realidad.

¡Vaya rollo que os he soltado!

sunsi dijo...

Caray, Patricia. Es que me la has quitado de la boca. Corcho con Mª Antonia Iglesias. Nunca he podido con ella. Siempre enfadada, siempre en contra o a la contra.

Lo que comentas de la Reina, es la opinión de mucha gente. Que como Reina mejor no haber hecho estas declaraciones porque es Reina de todos los españoles. Es complicado eso de la Monarquía.

Lo más penoso es el circo que se ha montado. Parece que nosotros, los españoles, somos así. Le sacamos punta a todo o de todo hacemos un chiste.

En fin... no es mala idea lo del chat. De momento me quedo como estoy, que ya es mucho, porque me gusta contestar a todo el mundo que pasa por aquí y no tengo la virtud de la brevedad. Y muchas veces no me da la vida para más.
Pero esun blog divertido. Yo me río tanto con los contertulios...
Besos, guapa.