miércoles, 26 de noviembre de 2008

Una mala noticia.


Cuando descolgué el teléfono y oí tu voz me trasladaste tu dolor y me dolí –me duelo- contigo. Sí; las cosas son así. Demasiadas veces, los acontecimientos que hacen tambalear la vida de un hombre no llevan introducción ni preámbulos ni una escueta dedicatoria. Uno se levanta... optimista... porque hoy luce el sol o porque hoy ha refrescado. Porque tengo trabajo, una familia que me quiere, unos amigos que cuentan conmigo y yo puedo contar con ellos, una vivienda digna, un plato en la mesa. La mayoría de los días uno se levanta así, contento, porque sí, porque... ¿qué más se puede pedir?.


Pero un día como esos, que uno se levanta como cualquier otro día, alguien da un golpe de timón y la existencia va a dar un giro de 180º. Las malas noticias que llegan sin previo aviso son “un mazazo duro, un golpe helado, un hachazo invisible y homicida”. ¡Qué elocuentes estos versos de Miguel Hernández!. Las malas noticias, que llegan como un huracán, revientan de cuajo - en décimas de segundo- los cimientos de una realidad que ha costado mucho esfuerzo construir, una estructura sobre la que se asientan proyectos, sueños, ilusiones.

Pero ahí está. Esta vez la mala noticia te tocó a ti, “compañero del alma, compañero”. Todos topamos un día u otro con ella. Y algún inoportuno que ya ha pasado por esos trances, con nivel de empatía 0, suele frivolizar con frases tipo “en todas partes cuecen habas”. Y dan ganas de responder que “cada uno cuece las suyas” o “que hay habas más difíciles de cocer que otras”. Y eso que se califica como un “cambio de planes” puede hacer saltar por los aires la confianza del hombre en el resto de los hombres. Porque las malas noticias ... arbitrarias e inesperadas siguen en el individuo que las recibe un proceso muy similar al de la digestión de un alimento en mal estado. Al principio se engulle como si tal cosa. El cuerpo tarda un tiempo en reaccionar. Y cuando reacciona, se enquista en el estómago. Hay que ingresar de urgencia. El intoxicado por una mala noticia recibe muchas visitas, muchas llamadas...”¿ha sido la mayonesa?”. Pero el intoxicado sólo se acuerda del maldito individuo que utilizó un huevo caducado para elaborar la “exquisita” salsa; una salsa que, seguramente, no probará nunca más. Las malas noticias siempre dejan un sabor agridulce y puede costar años arrancarlo del paladar. Todo depende del daño que hayan causado y del talante con el que se quiera – o se pueda- superar . ¡Ahí!.

¿Y ahora qué?. He encontrado una reflexión de Martín Luther King. “El método no violento es eficaz porque desarma a los adversarios. Pone al descubierto su defensa espiritual, debilita su moral al tiempo que intranquiliza sus conciencias”. Léela despacio. ¿Tu conciencia está tranquila?. Pues no mires atrás. La vida tiene reservado lo mejor para los que saben quemar las naves. No des un paso atrás... ni siquiera para coger impulso. Quien tú y yo sabemos se encarga siempre de escribir recto aunque los renglones se hayan torcido. Y lo que vale es el último capítulo. ¡¡¡Suerte!!!
(Un viejo artículo , que parecía muerto y hoy he querido resucitar)

14 comentarios:

Lucía dijo...

Sunsi, no se qué me pasa que el youtube me tapa parte de lo que escribes.Me pasa sólo a mí? tengo que pinchar en algún sitio?

sunsi dijo...

Boo. Ni idea. Yo lo puedo leer. Pero gracias por la advertencia.
Te dejo aquí el artículo:

Cuando descolgué el teléfono y oí tu voz me trasladaste tu dolor y me dolí –me duelo- contigo. Sí; las cosas son así. Demasiadas veces, los acontecimientos que hacen tambalear la vida de un hombre no llevan introducción ni preámbulos ni una escueta dedicatoria. Uno se levanta... optimista... porque hoy luce el sol o porque hoy ha refrescado. Porque tengo trabajo, una familia que me quiere, unos amigos que cuentan conmigo y yo puedo contar con ellos, una vivienda digna, un plato en la mesa. La mayoría de los días uno se levanta así, contento, porque sí, porque... ¿qué más se puede pedir?.

Pero un día como esos, que uno se levanta como cualquier otro día, alguien da un golpe de timón y la existencia va a dar un giro de 180º. Las malas noticias que llegan sin previo aviso son “un mazazo duro, un golpe helado, un hachazo invisible y homicida”. ¡Qué elocuentes estos versos de Miguel Hernández!. Las malas noticias, que llegan como un huracán, revientan de cuajo - en décimas de segundo- los cimientos de una realidad que ha costado mucho esfuerzo construir, una estructura sobre la que se asientan proyectos, sueños, ilusiones.

Pero ahí está. Esta vez la mala noticia te tocó a ti, “compañero del alma, compañero”. Todos topamos un día u otro con ella. Y algún inoportuno que ya ha pasado por esos trances, con nivel de empatía 0, suele frivolizar con frases tipo “en todas partes cuecen habas”. Y dan ganas de responder que “cada uno cuece las suyas” o “que hay habas más difíciles de cocer que otras”. Y eso que se califica como un “cambio de planes” puede hacer saltar por los aires la confianza del hombre en el resto de los hombres. Porque las malas noticias ... arbitrarias e inesperadas siguen en el individuo que las recibe un proceso muy similar al de la digestión de un alimento en mal estado. Al principio se engulle como si tal cosa. El cuerpo tarda un tiempo en reaccionar. Y cuando reacciona, se enquista en el estómago. Hay que ingresar de urgencia. El intoxicado por una mala noticia recibe muchas visitas, muchas llamadas...”¿ha sido la mayonesa?”. Pero el intoxicado sólo se acuerda del maldito individuo que utilizó un huevo caducado para elaborar la “exquisita” salsa; una salsa que, seguramente, no probará nunca más. Las malas noticias siempre dejan un sabor agridulce y puede costar años arrancarlo del paladar. Todo depende del daño que hayan causado y del talante con el que se quiera – o se pueda- superar . ¡Ahí!.

¿Y ahora qué?. He encontrado una reflexión de Martín Luther King. “El método no violento es eficaz porque desarma a los adversarios. Pone al descubierto su defensa espiritual, debilita su moral al tiempo que intranquiliza sus conciencias”. Léela despacio. ¿Tu conciencia está tranquila?. Pues no mires atrás. La vida tiene reservado lo mejor para los que saben quemar las naves. No des un paso atrás... ni siquiera para coger impulso. Quien tú y yo sabemos se encarga siempre de escribir recto aunque los renglones se hayan torcido. Y lo que vale es el último capítulo. ¡¡¡Suerte!!!

Anónimo dijo...

"Nunca nos perdonarán lo que nos han hecho"

Reacción de los individuos cuando advierten, reflejado en sus víctimas, la maldad de sus actos.

Mucho más frecuente de lo que imaginamos.

El ser humano tiende a digerir peor la bondad que la maldad.

Para la maldad estamos preparados, llenos de argumentos.

Frente a la bondad percibimos con mucha más claridad nuestras propias miserias.

Si tienes suerte, asumes tu propia fabilidad y aprendes.

En caso contrario, nunca perdonaremos lo que le hemos hecho.

sunsi dijo...

Pepa. Este artículo tiene una historia detrás que te explicaré en privado. ¿En el Fórum? Esta vez no faltaré. No sé cómo me lo montaré pero no quiero perderme ni la conferencia ni tu compañía.

"Yo he perdonado"... dijo la víctima. "No me interesa conocer las razones".

El mutismo, el no mirar atrás, la pasividad activa pone de manifiesto con cara, ojos, nombre ... al que ha hecho daño porque sí.. Y perdonarse a sí mismo , por lo visto, no es fácil. Palabra de la que lo ha comprobado en cabeza ajena.

No le deseo mal a nadie. Pero lo que deseo es que algunas noches de insomnio, unas cuantas, caigan sobre el que ha dañado. Para que recapacite y no vuelva a hacer daño. Daño, a veces , irreparable.

Evangélico es este fragmento "no des perlas a los cerdos". Temazo.
Que no es venganza, te lo aseguro. Es poner a cada cual en su sitio. Quien hace daño no se puede ir de rositas. Por encima de mi cadáver que no. Porque eso implica que pueden seguir rompiendo el alma a todo quisqui. Y así, con las intenciones oscuras de los que se llaman buenos, la sociedad se va al garete.
Buenas tardes, hedbana... esta vez con pelín de acritud. A veces los recuerdos se ponen de pie. Y te miran a la cara como si transcurrieran en presente.

Anónimo dijo...

Venga, nos vemos allí; no se cuando es, supongo que mi socia ya me lo contará.

En cuanto al resto, p'afuera telarañas!!!!!!!!!!!

Y separase de los malos, que contagian y hay mucho h.p. suelto.

De todos modos ¿quién conoces de esos que se reconozca malo , pero malo de verdad?

Un inciso, ya sabes que soy un poco torpe y que, para entender algo, me lo has de explicar para tontos: no entiendo nada de Drv., ni de Mc ni de nada.

sunsi dijo...

Que lo reconozca... ahora no lo recuerdo. Creo que nadie. Que lo haya hecho, se lo digas a la cara, con respeto... algún especimen suelto que no prolifera.

Hay que estar muy acostumbrado a pedir perdón de corazón por minucias para ser capaz de pedir perdón en pifiadas gordas. Y pedir perdón no se lleva. Es más fácil excusarse con medias verdades que son las peores mentiras.

Lo de Driver...

Diego, ¿puedes explicárselo a Pepa?
Se ha perdido por el camino.

Besiños. De todas formas, ya estoy yopara llamarte excavadora. El resto, con ese ingenio y gracia, me temo que no podría suplirle.

Anónimo dijo...

Lo de Diego lo explico yo, y así si me equivoco me equivoco yo.
Simplemente llevo un tiempo con una tensión profesional y familiar muy fuerte, y necesito descansar.

No sé si será mucho tiempo o no, pero hay veces que tocas fondo y lo mejor es.
Opción A: Cometer un par de asesinatos.
Opción B: Descansar y reordenar ideas.
Dado que la opción A está penada, opto por la opción B.

Si no he sido claro, lo digo más fácil.

El lunes se me fundieron los plomos.

Soy humano.
Nada de lo que me pasa tiene que ver con vosotros.
Eso sí, lo he expresado de forma pastoril, metáfórica e ininteligible.
No me extraña que os haya despistado.

En fin, no es grave.
Los motores de los Volvos también gripan de vez en cuando.

Ya pasará.
Un beso a todos.

He sido sincero.
Y os he regalado lo mejor que tengo.

¿Se entiende ahora?

Anónimo dijo...

Sé de lo que hablas...el día que mi vida cambió 180º lo cual ha sido en varias ocasiones , la sensación experimentada al recibir la noticia es la misma, aunque sean diferentes situaciones todas coinciden en el fondo: el sufrimiento. Ver como tu mundo se paraliza lleno de dolor sin avanzar, mientras el resto ajeno sigue su vida.Y te preguntas por qué te tocó.
Es curioso, pero se permanece bloqueado en el tiempo, sólo ves a través del prisma del dolor y de la desilusión. Todo aquello que te hacía feliz: una canción un paisaje, la puesta de sol pasa desapercibido, el prisma desde el que se contempla, ya no es el mismo, nos ahogan los sentimientos y la decepción. A veces es una persona, el trabajo,o la enfermedad. El caso es que todo un proyecto de vida se puede ir al traste. A veces, nos tambalea sólo lo suficiente para dejarnos claro que la vida no está en nuestras manos. Hemos de dejar pasar el tiempo con la mayor serenidad posible, es muy fácil decirlo, para ver las cosas con perspectiva. Estoy de acuerdo contigo que lo principal es tener la conciencia bien tranquila, y no mirar atrás, eso a veces cuesta porque sin quererlo los recuerdos afloran. Es entonces cuando debemos tener claro que la vida nos tiene reservado lo mejor, y el tiempo pone las cosas en su lugar unas veces antes de lo esperado, otras más tarde, el caso es que “estamos en buenas manos”, aunque pensemos que Se ha olvidado de nosotros,¡ qué equivocados estamos¡, es cuando no se separa ni un minuto, sólo que nos cuesta entender que Él escribe recto con renglones torcidos”.
Un beso.

Anónimo dijo...

Driver majote: No sabes lo que me descansa que hayas optado por la opción B.
Aquí te estaremos esperando el tiempo que haga falta.
Vamos a decir que no te vas, sino que Driver hace un paréntesis.
Da un abrazote a tu mujer y a tus hijas. A Sarita un arrechucho especial.
Voy a rezar ahora mismito, en cuanto termine, por tus preocupaciones
No vuelvas repuesto en plan Mc-Mc.
Entre tú y Pepa...
Que yo ya tengo edad para sopitas y buen vino

Anónimo dijo...

Mc, Driver, mi seductor caballero, te estaré esperando, con el ferrari a punto y un par de pájaros a mano.

Aunque nos conozcamos desde hace tan poco, me has dejado coladita, coladita, coladita.

Y a osaposa, también.

sunsi dijo...

Estaba esperando a una alumna. Mañana tiene examen de filo. No llegaba. En casa cerramos la terraza con un acristalado para aprovechar un espacio donde poder trabajar. He visto un coche. Me he dado la vuelta rápido para bajar a abrirla; no funciona el interfono. No he visto la puerta de cristal. Total... la nariz como una patata, un dolor en la frente que ni os cuento, el labio partido por dentro... ¡Y no era ella!. En fin. Que veremos mañana si parezco un monstruito, porque la hinchazón va a más.

Y digo yo... ¿es de recibo que llegues 3/4 de hora tarde a una clase, sabiendo que te están esperando? Pues no la he dado. No estoy en condiciones.

Y una segunda lectura ¿qué significa para estas criaturas -no tan criaturas- un profesor? La pregunta es retórica. Se contesta sola. Pero se admiten sugerencias.

Anónimo dijo...

Un profesor es una persona a la que se le paga para que apruebes, o para tener la media más alta con el fin de poder hacer los estudios que prefieras

sunsi dijo...

Caramba. Elsa Pataky es algo más que un cuerpo.

Aquí, la del trompazo, llamó a la madre y le dijo que flaco favor le hacía a la criatura consintiendo que no escuchara en clase y después pagar a un profe para subsanar su holgazanería. Que criar hijos blanditos tiene sus consecuencias a largo plazo.

Me lo agradeció.

Blancael dijo...

No se de que va el tema,pero entre lineas veo que driver tiene algun problema,espero que se se pueda resolver y que tenga mucho animo.
yo se lo que es levantarse y pensar que hoy será un dia mas,, al trabajo, con la famlila y de repente te dan una noticia que te rompe todos los esquemas, cuesta asumir y te rompe en pedacitos, pero esos pedacitos vuelven a pegarse y formar otra vez a la persona con nuevos animos y esperanza.
según que cosas ccuesta mas o menos superarlas ,, pero para eso esta la esperanza,y la fuerza de de Dios, de los amigos y la familia, creo que se de lo que hablo, y Sunsi tambien lo sabe.
Espero que no sea nada muy grave y esperanzas y muchísimo ánimo para el que sufre.
besos.