martes, 26 de agosto de 2008

Muerte y esperanza



Fue a las cuatro de la madrugada de ayer. Velaban su sueño ya inconsciente su hijo novicio y su nieto mayor. Ya está. Su corazón dejó de latir y-curioso para muchos, lógico para sus allegados- la paz fue el factor común de todos los que han estado a su lado.


Fuimos toda la familia al tanatorio; nos despedimos de Paquita.

Sólo quería resaltar que en el tanatorio no había nadie menor de edad, ni siquiera con la mayoría de edad recién estrenada.


Nos despedimos de Paquita y rezamos junto a una caja sencilla de pino. Rezamos allí, a su lado. Mis hijos también.


¿Por qué se niega la posibilidad a los niños, a los jóvenes de conocer una realidad ineludible? ¿Por qué los apartamos de todo lo que evidencia la otra cara de la existencia humana?


"Ya tendrán tiempo para sufrir". Y cuando llega el momento ... otro topicazo: "No lo asume", "no tolera la frustración".


¿Pues qué creían? El hombre vive para vivir. Y la vida se acaba. Los creyentes sabemos que continúa en la otra Vida. ¿A qué esperamos para hablar del tema sin estridencias, sin dramas?


Ayer el tanatorio sabía a gloria. La tristeza humana fue superada por la esperanza de la vida eterna. Y eso, si no se palpa, es difícil creerlo.


Gracias, Paquita.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Somos agua, que a veces es hielo, y a veces neblina; otras mar salada.
Todo depende del sol, la mañana y los reflejos dorados.
...
Tal vez la vida y la muerte sean estados diferentes de una misma esencia.
Tal vez los niños entiendan mejor que los adultos el ciclo del agua, el ciclo de la vida, las cosas sencillas.
Y los adultos, obstinados, prejuiciosos y torpes, queremos dar unas explicaciones tan soberbias, que lo único que hacemos es transmitir nuestros miedos heredados.
...
Aprendamos a hablar claro a los niños.
Los ejemplos y las metáforas nos ayudan a acercarnos al mundo blanco, al de la inocencia, al de la claridad.

D.E.P., amiga de Sunsi.
...
La grandeza del matrimonio no consiste en que los adultos produzcan niños, sino que los niños produzcan adultos.
Sin miedo a morir.
Sin miedo a vivir.

Anónimo dijo...

El anterior comentario es de Diego.

sunsi dijo...

Qué magnífico comentario, Driver. Tienes el don de la palabra exacta, del juego de la palabra para inventar palabras que no existen y explicar cosas que , a veces , no son accesibls a la mente humana.

Lo subo tengo que subirlo. Es precioso. Y el final, magistral.

Gracias por comentar aquí. Para mí es un privilegio.

sunsi dijo...

Perdón. Has aclarado que el comentario es de Diego. Lo que me hace pensar que no es de Driver. ¿Me explicas la diferencia?

Anónimo dijo...

A veces firmo con mi nombre propio, Diego. Otras como Driver.
Depende del tema.
Cuando siento que es algo personal, uso mi nombre.
Cuando es algún tema general, firmo Driver.
Somos dos caras de la misma moneda.
Pero si algún día estás en peligro, necesitas ayuda o una respuesta a una cuestión difícil, ni lo dudes, llama a Driver.
Siempre se puede contar con él.
Todos tenemos un camionero en el fondo de nuestro corazón.
El que de verdad se enfrenta a la vida.
La parte libre de nuestra mente.